Uriel Llasacce Orosco*
Este existe cuando se produce la «apropiación o utilización de medicamentos y materiales de bioseguridad en periodos de pandemia», v.g. Covid-19, además de la afectación de los bienes jurídicos específicos que protege el delito de peculado: principio de no lesividad de los intereses patrimoniales de la administración pública y abuso de poder del funcionario público que quebranta los deberes funcionales de lealtad y probidad. También, se pueden afectar bienes jurídicos personalísimos fundamentales.
Para la adecuación de estas conductas, no bastaría el ordenamiento penal interno –peculado, Art. 387 del Código Penal–, sino que es necesario recurrir a un tribunal de justicia internacional como la Corte Penal Internacional, pues solo así, se haría justicia a favor de víctimas, castigándose ejemplarmente a funcionarios que incurrieron en dichas conductas a costa de habitantes de un determinado país o región.
No toda apropiación o utilización de medicamentos y materiales de bioseguridad, en periodos de pandemia, podría tipificarse como delito de peculado. Interpretándose este delito, se tienen las razones siguientes: i) aparte del bien jurídico propio quebrantado en este delito, resultarían también otros derechos afectados como el derecho a la vida, integridad personal y derecho a la salud; ii) el valor de lo apropiado o utilizado está enfocado sólo en la estimación pecuniaria, lo que no guarda relación con derechos fundamentales.
Finalmente, iii) encuadrarlo en caudales o efectos destinados para fines asistenciales, programas de apoyo o inclusión social, tampoco serían suficientes, porque el legislador penal al redactar este delito no ha tomado en cuenta contextos de emergencia sanitaria por pandemia, sino más por el contrario lo reguló bajo la óptica de tranquilidad de salud pública. En pandemia, el peculado resulta corto para tipificar estas conductas. Debería considerarse como delitos de lesa humanidad.
*Catedrático de la Escuela Profesional de Derecho (filial Ayacucho) de la ULADECH Católica
Peculado de medicamentos y bioseguridad en pandemia ¿Delitos de lesa humanidad?
